Representantes Vargas, Jacobs, Levin, Peters reiteran su llamamiento para la inmediata declaración federal de estado de emergencia ante los elevados niveles de gases tóxicos en el sur de San Diego
WASHINGTON - Hoy, Representantes de los EE.UU. Juan Vargas (CA-52), Sara Jacobs (CA-51), Mike Levin (CA-49), y Scott Peters (CA-50) reiteraron sus llamamientos para que se declare un estado de emergencia federal inmediatamente, en medio de los resultados recientes que muestran altos niveles de gases nocivos en el sur de San Diego debido a la contaminación del Valle del Río Tijuana.
El año pasado, la delegación del Congreso solicitó un estado de emergencia federal para ayudar a combatir la contaminación en el valle del río Tijuana.
“Escribimos para reiterar nuestra solicitud de un Estado de Emergencia a raíz de los nuevos descubrimientos que muestran niveles alarmantes de gases nocivos que emanan del Río Tijuana. Los datos recientes han dejado claro que estos gases están causando una amenaza inmediata y grave para la salud y la seguridad de los residentes del sur de San Diego, y nuestra comunidad necesita apoyo adicional”, escribieron los legisladores.
“Hay que tomar medidas inmediatas para responder a esta amenaza inminente y grave para nuestras comunidades por la exposición regular a las toxinas en el aire y en el agua. Una declaración federal de emergencia ayudaría a los residentes del sur de San Diego a tener acceso a los purificadores de aire y a los equipos de análisis que necesitan para protegerse contra esta amenaza inminente”, continuaron los legisladores. “El desastre ambiental continuo en el Condado Sur de San Diego merece el mismo sentido de urgencia y atención inmediata que cualquier otro desastre natural o ambiental. Si no se afronta, una crisis de contaminación de esta magnitud continuará poniendo en peligro a nuestras comunidades. Como delegación que representa a la región de San Diego, le urgimos una vez más a que tome medidas para hacer frente a la crisis actual por medio de proclamar un Estado de Emergencia.”
El texto completo del carta está disponible AQUÍ y debajo:
Estimados presidente Biden y gobernador Newsom:
Escribimos para reiterar nuestra solicitud de un Estado de Emergencia a raíz de los nuevos descubrimientos que muestran niveles alarmantes de gases nocivos que emanan del Río Tijuana. Los datos recientes han dejado claro que estos gases están causando una amenaza inmediata y grave para la salud y la seguridad de los residentes del sur de San Diego, y nuestra comunidad necesita apoyo adicional.
Durante demasiado tiempo, millones de galones de aguas residuales, basura y desechos industriales han fluido diariamente desde Tijuana, México, hacia el Valle del Río Tijuana en San Diego, California, y desde la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de San Antonio de los Buenos, que se encuentra rota, hacia el Océano Pacífico. Estos flujos han convertido las playas de San Diego en las más contaminadas del país, han cerrado playas durante más de 1.000 días consecutivos y han afectado gravemente a la salud, los medios de vida y la capacidad de acceso a las aguas recreativas de nuestros residentes. Esta contaminación ha obligado incluso a la Marina a interrumpir algunos entrenamientos en el agua para evitar la exposición de su personal a las toxinas. A pesar de más de una década de trabajo para resolver el problema, nuestras comunidades siguen sufriendo el impacto de las aguas residuales procedentes de México.
Pero en los dos últimos años, esta crisis se ha intensificado. El año pasado, los investigadores publicaron nuevos datos sobre la transmisión aérea de las toxinas del río Tijuana, dejando claro que las aguas residuales suponían una amenaza no sólo para los usuarios de las playas, sino también para las personas que viven cerca. En respuesta, le pedimos al Presidente Biden que declarara una emergencia federal en reconocimiento del peligro para la salud.
Nuevos datos obtenidos este mes han dejado más claro que nunca que esto es una emergencia. Los investigadores que estudian las repercusiones medioambientales en la salud de la comunidad han confirmado que las comunidades cercanas al valle del río Tijuana presentan niveles insalubres de sulfuro de hidrógeno y cianuro de hidrógeno (HCN), gases nocivos que se han utilizado en la guerra química. En uno de los lugares se midieron diez partes por millón de HCN, que es el límite de exposición establecido por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional para los trabajadores con equipo de protección personal.3 En otro lugar se registró una medida de cincuenta partes por millón de HCN, que es el nivel más alto que pudieron detectar los medidores de los investigadores.
Los investigadores han informado de que la exposición prolongada a estos gases es peligrosa para la salud humana -especialmente para las poblaciones vulnerables- y puede provocar náuseas, dolores de cabeza, problemas del sistema nervioso y, en casos extremos, la muerte. En respuesta, los distritos escolares del sur de San Diego han limitado las actividades al aire libre para sus estudiantes, y el Distrito de Control de la Contaminación del Aire del Condado de San Diego ha emitido una advertencia y está recomendando que los residentes que noten fuertes olores de aguas residuales permanezcan adentro si es posible o limiten la actividad física al aire libre. Para protegerse de estas amenazas, los científicos han recomendado a los residentes que instalen filtros de aire o purificadores para eliminar los gases nocivos del aire dentro de sus casas.
Hay que tomar medidas inmediatas para responder a esta amenaza inminente y grave para nuestras comunidades por la exposición regular a las toxinas en el aire y en el agua. Una declaración federal de emergencia ayudaría a los residentes del sur de San Diego a tener acceso a los purificadores de aire y a los equipos de análisis que necesitan para protegerse contra esta amenaza inminente. Después de que el Presidente Obama declaró el Estado de Emergencia para hacer frente a la crisis del agua con plomo en Flint, Michigan, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias pudo proporcionar filtros de agua y tecnología de monitoreo del agua muy necesarios a los residentes. Los residentes del sur de San Diego necesitan un apoyo similar para ayudarles a acceder a los filtros de aire y a los equipos de control necesarios para mantenerse a sí mismos y a sus familias seguras.
A la luz de los recientes descubrimientos, queremos reiterar nuestra petición de que se declare un Estado de Emergencia para establecer una respuesta gubernamental a varios niveles para abordar este asunto y abrir vías para obtener financiación federal adicional. El desastre ambiental continuo en el Condado Sur de San Diego merece el mismo sentido de urgencia y atención inmediata que cualquier otro desastre natural o ambiental. Si no se afronta, una crisis de contaminación de esta magnitud continuará poniendo en peligro a nuestras comunidades. Como delegación que representa a la región de San Diego, le urgimos una vez más a que tome medidas para hacer frente a la crisis actual por medio de proclamar un Estado de Emergencia.
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